Reconocidos en todo el mundo por su uso globalizado hoy en día, se
estima que se realizan más de 5 mil millones de lecturas cada día en el planeta
y no es de extrañar puesto que se calcula que es 10.000 veces más rápido y
5.000 más eficaz que la captura manual tradicional.
Haciendo un poco de
historia podríamos decir que la idea del código de barras surgió en 1932
cuando Wallace Flint en su tesis de maestría planteo la idea de gestión de
inventario en un supermercado utilizando tarjetas perforadas para identificar
lo que se adquirió.
El primer código de barras
fue creado por Bernard Silver y Norman Woodland, reconocidos como los padres
del Código de barras; durante los años de 1948 y 1949.
Tan cotidiano nos es realizar una llamada con el teléfono móvil como ver representaciones de códigos de barras en todo tipo de artículos y empresas hoy en día. No es de extrañar de esta forma que ambas tecnologías terminaran por encontrarse y revolucionarse una a la otra.
Código QR (Quick Response)
La empresa japonesa Denso-Wave desarrolló en 1994 el que hoy conocemos como código QR (Quick Response Barcode) liberando su desarrollo para uso general y no ejerciendo su derecho de patente.
Por estos motivos la generación y uso de éste tipo de codificación se ha generalizado por gran parte de la industria llegando al público en general, creando un nuevo mundo de aplicaciones destinado a la promoción y el marketing.
Como podemos observar en la imagen inferior un código bidimensional tiene mayor capacidad de representación de información puesto que hace uso de sus dos dimensiones.
• Solo Numérica: Máx. 7.089 caracteres.
• Alfanumérica: Máx. 4.296 caracteres.
• Binario: Máx. 2.953 bytes.
• Kanji/Kana: Máx. 1.817 caracteres. (simbología japonesa y china).
Una de las principales desventajas con las que cuenta un teléfono móvil se encuentra en la entrada de datos mediante teclado, es cierto, que la tecnología en este sentido ha mejorado mucho el rendimiento de los dispositivos pero aún está lejos de convertirse en un mecanismo tan cómodo para el usuario como el teclado de un PC tradicional.
Por este motivo y para facilitar no solo la entrada de información sino la facilidad de localización de la misma los códigos QR son una herramienta bienvenida por la tecnología destinada a la movilidad.
Algunos ejemplos de uso de códigos QR aplicados en publicidad
Sus aplicaciones son casi infinitas, la imaginación es el único límite que tenemos a la hora de aplicar este tipo de códigos en nuestras ofertas comerciales. El papel ya no es el límite.
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